El presidente Evo Morales afirmó ayer que el Gobierno brasileño se “equivocó” al otorgar asilo político al senador Roger Pinto, quien es acusado por desacato y delitos de corrupción.
“Aquí no hay persecución política, hay delincuentes políticos”, sostuvo Morales en una conferencia de prensa. El Jefe de Estado recordó que el senador opositor es acusado por la violación de los derechos humanos y por varios casos de corrupción.
Roger Pinto, según parlamentarios de la oposición, tiene 20 procesos abiertos en su contra, entre ellos por desacato.
Morales, consultado sobre si su gobierno otorgará el salvoconducto a Pinto, dijo que desconoce cómo es ese procedimiento jurídico. “El tema salvoconducto no entiendo legalmente, no sé qué corresponderá”.
El 8 de junio, el Ministerio de Relaciones Exteriores del país vecino confirmó a través de su portal que se le concedió asilo al senador de Convergencia Nacional, quien desde el 28 de mayo permanece en la Embajada de Brasil en La Paz a la espera del salvoconducto para ser trasladado vía aérea hasta el país vecino.
El mandatario anunció ayer que entregará a las autoridades brasileñas documentación amplia sobre los procesos abiertos contra el senador Pinto, para que puedan valorar la situación del asambleísta, aunque no precisó cuál es el objetivo de esta acción cuando el Gobierno brasileño ya concedió el asilo político.
A los cinco días de confirmado la protección a Pinto, Bolivia aún no se pronunció sobre el salvoconducto que se requiere para que Pinto deje la Embajada brasileña y viaje hasta Brasil.
El jefe de la bancada de senadores del MAS, Eugenio Rojas, sostuvo ayer que Bolivia no está “obligada” a dar el salvoconducto a Pinto. “Si no hemos ratificado la Convención de 1954 sobre asilo y refugio, Bolivia no estaría dentro de esto (acuerdo)”.
La analista en temas internacionales Karen Longaric explicó ayer a Página Siete que esto no es un óbice para impedir la dotación de un salvoconducto, “el problema es que Bolivia no ha ratificado todas las convenciones sobre asilo”; sin embargo, normas internacionales y nacionales reconocen el asilo.
De acuerdo con la Convención Americana sobre Asilo Diplomático, Bolivia está “obligada” a entregar el salvoconducto.
El ex canciller Armando Loaiza explicó también que si el país receptor decide conceder asilo, “la otra parte (Bolivia) no puede discutirlo, sino acatarlo”.
Asambleístas opositores denunciaron ayer que no otorgar ese documento es un despropósito del Gobierno, que pretende darle largas a este trámite para evitar que Pinto salga del país.
El senador Rojas sugirió que la Cancillería boliviana debe analizar si corresponde o no dar el salvoconducto o gestionar una “reunión de alto nivel” con autoridades del Gobierno brasileño para conversar al respecto.
Fuente: Página Siete
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