Instó a que las personas con factores de riesgo, de la tercera edad, niños y adolescentes eviten la permanencia prolongada en espacios abiertos, terrazas y balcones, así como de actividades físicas o recreativas al aire libre, “mientras los niveles de contaminación permanezcan altos”.

Pérdida

Según datos del Viceministerio de Defensa ya se quemaron 2,9 millones de hectáreas; sin embargo, la Fundación Tierra, especializada en la investigación en desarrollo rural sostenible, denunció que hay más de 4 millones de hectáreas devastadas por los incendios, incluido más de un millón en áreas protegidas.

En total, seis áreas protegidas son afectadas por el fuego, entre ellas el parque nacional Noel Kempff Mercado, de acuerdo con datos del Observatorio Bosque Seco Chiquitano.

Municipios afectados

El viceministerio de Defensa, Juan Carlos Calvimonstes, reportó 20 municipios afectados en Santa Cruz, Beni y Pando, y habló de 62 comunidades alcanzadas por el fuego, en algunas de ellas los pobladores tuvieron que abandonar sus hogares.

La autoridad nacional admitió la dificultad para controlar los incendios. “Apagamos tres incendios y al día siguiente hay cuatro; controlamos cuatro y aparecen cinco”, señaló.

Suspenden clases

En poblaciones cruceñas como Guarayos y Concepción llegaron a suspender las clases por el humo; en los municipios benianos de Guayaramerín y Riberalta, las clases presenciales fueron suspendidas ayer y reemplazadas por la modalidad virtual.

Los incendios son consecutivos

Entre julio y noviembre de 2023, más de 3,3 millones de hectáreas de zonas boscosas, matorrales y pastizales secos se quemaron en al menos 160 incendios forestales registrados en el país.

El año con mayores afectaciones fue 2019, con 5.305.512 hectáreas quemadas, mientras que en 2022 la superficie dañada fue de 4.466.540 hectáreas.

Más de 400 brigadistas y personal técnico de la Gobernación trabajan en control de los incendios en Santa Cruz.

Reportan “mala” y “muy mala” calidad del aire

Las quemas, chaqueos e incendios forestales han ocasionado que la calidad del aire en las ciudades de La Paz, Cochabamba, Santa Cruz y Pando se sitúen en “mala” y “muy mala”.

En la sede de gobierno, este martes se situó en 188 del (Índice de Calidad del Aire), lo que refleja que sea “muy mala”, de acuerdo con datos de la Unidad de Servicios Ambientales de la Alcaldía.

El esmog y la humareda también afectaron a la ciudad de Cochabamba que ayer reportó 157 del ICA, es decir, una calidad “muy mala” de aire.

Respecto a Santa Cruz de la Sierra la Alcaldía informó que la calidad del aire alcanzó los 112, situando al municipio en la categoría de “mala”.

Cobija, la capital de Pando, tiene un Índice de Contaminación del Aire (ICA) de 332, es decir, “extremadamente malo”.

Los reportes de la calidad del aire reflejan que los grupos vulnerables, como menores de edad, adultos mayores y quienes sufren problemas respiratorios podrían verse afectados en su salud, de acuerdo con especialistas.